El mundo se sacudio
Como las montañas se derrumbaron y surgieron volcanes.
Océanos movidos y mares enteros desaparecieron.
Los bosques se quemaron hasta el suelo, sin dejar nada a su paso.
¿Segundos? ¿O días? Se sintió como para siempre
Así le dio la espalda a su amado mundo, para nunca volver a aparecer.
Y la lluvia cayó pesadamente hacia la tierra.
Llevaba una armadura ligera regalada a ella por el Kodan del Honor de las Olas.
Pintado en azul zafiro y arena dorada en honor al agua y al sol.